He visto ángeles caer,
perderse en la nieve,
cortar sus alas
y llorar auxilio.
Los he visto hundidos;
desangrada su nariz
como todos sus huecos
gritan, retuercen, maldicen
y vuelven a caer.
He visto ángeles volar
en pedazos blancos,
los he visto ahorcarse
con su propia aureola.
Han caído ante mis ojos
mordiendo el polvo,
se les ve ahogarse en humo y cenizas
olvidando cómo volar
de este mundo.
Lloran ojerosos cadavéricos
al prerrecordarse divinales
y maestros en al arte
de cantar.
Y no es nada simpático
estar muy cerca para darse cuenta
del triste olor que emana la sangre
de un cuerpo angelical
vencido por la gravedad.
2 comentarios:
dóndestás
Ángeles. !Yeah!
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